Contenido
I) Introducción a San Juan de la Cruz
II) La evolución espiritual según San Juan de la Cruz
En primer lugar, como I) Introducción a San Juan de la Cruz, será muy útil leer sus obras en pasajes seleccionados (Ed. BAC en un volumen). Veremos una concordancia muy profunda con la doctrina tomista y la síntesis del pensamiento medieval revigorizado en el siglo XVI. Las obras de San Juan de la Cruz son cuatro principales: La subida del Monte Carmelo, La llama de amor viva, el Cántico Espiritual, La noche oscura. Tenemos también unos fragmentos que se llaman Dichos de luz y amor y además cartas y especialmente las poesías, que son muy importantes (Es uno de los máximos escritores de la lengua castellana). Las poesías surgen de una profunda experiencia y pueden ser comprendidas aparte de las obras en prosa. Veremos cómo expresan una realidad de unión con Dios, que es personal, y pueden entenderse en sentidos distintos según las personas. Comunican una experiencia subjetiva en el mejor sentido del término.
Veremos después, II) La evolución espiritual según San Juan de la Cruz Analizaremos el hecho de que San Juan toma el sistema clásico de la repartición de las etapas de la vida espiritual formulado en la Edad Media, especialmente por el cartujo Hugo de Balma (s. XIII), que escribió un tratado sobre las tres vías. En este libro se señalan las tres etapas. La primera es la “vía purgativa” (en la que se purifica la persona de pecados y vicios), la segunda es la “vía iluminativa” (en la que prevalece la iluminación divina en el intelecto), y la tercera la “vía unitiva” (en que se llega a la plenitud de la unión con Dios en este mundo, sin perder la creaturalidad). Estas tres etapas son concebidas por Hugo y Juan de la Cruz en un sentido ascendente: la segunda es más perfecta que la primera, y la tercera que la segunda. Siguen una tradición muy antigua, que tiene su origen en Dionisio Areopagita.
La primera requiere un período relativamente prolongado en la vida de la persona. La segunda corresponde a aquel efecto de la gracia que es la restauración de la naturaleza (la gracia santificante restaura la naturaleza humana y la eleva). Estudiaremos especialmente cómo prevalece en la consciencia del sujeto la restauración de la razón y del orden de las potencias humanas. La afectividad se subordina a la voluntad y la voluntad a la inteligencia. Si bien las ideas que se consideran son sobrenaturales, el centro de la vida de la persona no está constituido aun por lo sobrenatural sino por la restauración de la naturaleza. Es una etapa, si bien movida por la gracia, filosófica. Puede ser que en esta etapa prevalezcan efectivamente los intereses filosóficos. La tercera vía, la vía unitiva (llamada “de los perfectos”), se encuentra el pasaje al nivel propiamente sobrenatural. La actividad de las potencias humanas está divinizada. Realizan operaciones por encima de las que naturalmente ejercitan, no sólo porque son más intensas, sino porque son diversas de las naturales: según los actos de intelecto y voluntad que Dios mismo tiene. La persona entiende de una manera divina y ama de una manera divina. Aquí se da la perfección de las tres virtudes teologales, que se manifiesta en toda las dimensiones de la persona, llegando al cuerpo. Es la etapa de la cognitio Dei experimentalis.
Seguir estudiando este Curso de Filosofía y Mística me encanta.
Silvana Marcela Perez
Curso de Filosofía y Mística en San Juan de la Cruz - Enero 2012
Encontré lo que buscaba. Este curso es bueno
Anónimo
Curso de Filosofía y Mística en San Juan de la Cruz - Octubre 2011
Un curso con un temario muy interesante y enfocado en la Filosofía y mística en san juan de la cruz.
Juan
Curso de Filosofía y Mística en San Juan de la Cruz - Octubre 2011